miércoles, 7 de septiembre de 2011

SERENATA PARA LA TIERRA DE UNO


No, mi país no es el mejor del mundo, en mi país la injusticia corre por las calles, se asoma a las puertas y ventanas, se escurre por los rincones llevando un halito de muerte que hiela la sangre y paraliza el alma. En mi país hay miles de voces silenciadas, horrores que de tan espantosos son inconfesables. En mi país no abunda la consciencia, por el contrario es más bien escasa. Siguen venciendo los corruptos delincuentes de saco y de corbata. Se sigue negociando con la vida, se sigue atropellando la palabra, del que dice la verdad sin contenerse, del que dice lo que siente y lo que pasa. Pero mi país me cala hasta los huesos, me llega al corazón, la vida, el alma, y es por eso que le doy mi tiempo entero, y es por eso que busco, cada día con más ansias, como hacerlo más parecido a lo que sueño y más distante de lo que me espanta. Como construirlo más justo y más consciente,  más acorde con el verde propio de sus montañas, más puro, diáfano y transparente, más amigo de la dignidad humana, porque a mi país le falta mucho, mucho, yo nunca le volveré la espalda. Y no importa lo mucho que me duela, le seguiré trayendo serenata.



http://www.youtube.com/watch?v=zvd-8DRur-A

lunes, 1 de agosto de 2011

DISERTACIONES

Enamorarse, amar a alguien, ¿qué significa?, ¿qué valor tiene o puede llegar a tener? ¿ física, química, admiración, sensibilidad, sentimiento?, tantos sucesos desencadenantes y ninguna causa en particular. Obviamente podemos dedicarnos al análisis y siempre encontraremos las razones, ciertas o ficticias estarán allí, acudirán en nuestro auxilio, pero en realidad ¿son tan validas cuanto quisiésemos que fueran? ¿Y tendrá sentido acaso el buscarlas? No sería más sencillo y honesto afirmar que amamos simplemente porque sí, muchas veces sin razón o mérito alguno, solo porque el amor aparece allí como un hecho incontestable, como un geiser en medio de la nada, acaso a veces de un desierto. Aparece para volverlo todo patas arriba o para acomodarlo de nuevo y ponerlo en su sitio, pero aparece para fortuna o infortunio de aquellas y aquellos que han de vérselas con él. Lo cierto es que una vida al margen de la experiencia amorosa sería infelizmente más tranquila y obviamente más árida, más baldía y desolada, tal vez por eso amamos al amor más que a cualquier otro tipo de experiencia, lo necesitamos en todas sus formas y especies, a veces incluso en aquellas que sin llegar a ser lo simulan, lo imitan o reflejan, y por ello quizás no importa tanto el saber cómo el sentir o el vivir,  el resultado mismo de la experiencia; pues aunque ella misma no se pueda definir, sus efectos son claramente decisivos y determinantes, amar nos constituye en seres humanos, nos aleja del simple impulso animal y nos hace trascender. Sin importar si este amor es correspondido o no, sin tener en cuenta su felicidad o infelicidad posibles, el solo hecho de asomarse a la experiencia amorosa es de por si un logro manifiesto, pues nos lleva a debatirnos completamente, a revisarnos e intentar conocernos, como nada más puede hacerlo. Nos abre a la necesidad del otro o de la otra, a la experiencia de la indagación, al anhelo de saber, de dar, de recibir, a la búsqueda de perfección y de desarrollo, de aprendizaje, de ahí que Platón considere al amor como la idea más poderosa, la que mueve al mundo al dinamizar el espíritu en aras de lo que es en sí mismo bueno y bello. Entonces más allá del romanticismo que sitúa el valor del amor en el amado o de la propia filosofía de las ideas que lo centra en lo amado en tanto que ideal, quizás el valor del amor esté en el simple hecho de amar, en el esfuerzo y la intención de darse y recibir, de proyectarse al mundo en la realidad de los otros, de lo otro. Y pese a coincidir con Sartre en la consideración de que tal vez este amor sea en sí mismo un imposible en tanto que aprensión del ser y de la verdad, a diferencia de él considero que esto lejos de desvirtuar el esfuerzo lo reafirma, pues al fin de cuentas lo interesante de la búsqueda es lo inaprensible de la respuesta, de otro modo ¿para qué siquiera intentar pensar?.

miércoles, 27 de julio de 2011

FATIGA

Estaba cansada, llevaba ya varios días matando gente, cada asesinato exigía de ella todo su potencial y creatividad. Realmente no era una tarea fácil escoger la víctima y descifrarla, construir el escenario para el crimen, determinar la hora y circunstancias, no dejar huellas delatoras y sobretodo hacer que el cierre fuera perfecto. A veces se sentía extenuada y carente de motivación, especialmente cuando la víctima le era desconocida o extraña, cuando no había móviles personales, sino que se trataba de un encargo. Ante todo porque sus clientes no solo establecían a quien debía matar, sino que determinaban que clase de muerte debía dársele al sujeto en cuestión: veneno, accidente, cuchillo, bala, suicidio, cosa que la hacía sentirse por completo exigida y limitada. Sin embargo al final poco importaba, siempre lo lograba, aunque obviamente algunas veces de forma más artística y satisfactoria y otras de manera llana o incluso con algunas  enmendaduras. Total lo importante era que el cliente quedara satisfecho, que decir el cliente, pensó, no tenía un cliente, más bien varias  clientas. Algunas bastante entusiastas, otras, las más indecisas, incluso algunas renuentes a manifestar cualquier clase de deseo o necesidad de venganza. Incluso había casos decepcionantes en los que ni siquiera era posible llevarlas a escoger víctima alguna. Repaso sus aventuras criminales, simplemente para establecer  la ruta del que había sido su recorrido. El crimen más fácil fue el primero – contraviniendo con ello todas las reglas del asesinato – tal vez porque para este tenía motivos netamente personales y conocía a su víctima de manera profunda, quizás, porque fue un homicidio limpio, algo así como una muerte del todo natural. A Jorge lo mato en plena tarde, en presencia de su esposa y de sus hijos, y no, no sintió culpa o compasión alguna, más bien experimento cierta clase de divertida liberación. A decir verdad a su propia hija le encantó el relato de los hechos, incluso varios de sus amigos lo aplaudieron. Los que siguieron fueron a decir verdad sencillos, algunos más satisfactorios que otros, como el de la fea, sintió tanto gusto al matarla, que incluso lo público. Con Jenny fue más difícil, no la conocía y aunque tenía motivos para que le desagradara no pensó que estos llegaran al punto de matarla, sin embargo su amiga se lo pidió y ella no pudo negarse, ¿cómo? Si la quería tanto. Así que la mato, que sea veneno le dijeron y claro veneno concedió, el problema no fue dárselo o que ella se lo tomara, incluso la muy tonta lo hizo por sus propios medios, el problema fue hallar la inspiración para matarla, encontrar ese tan preciso impulso homicida sin el que el crimen no es más que una mera posibilidad. No, definitivamente no era nada fácil esto de ser una asesina literaria.

jueves, 7 de julio de 2011

RESIGNACIÓN

Que tristeza tú desasosiego,  en el vano afán que traes de aferrarte a lo que ni ha sido ni será. Vuelves la espalda a la vida y te niegas a seguir, no he de ayudarte porque no puedo. No he de tenderte más esa mano que sé no has de tomar, porque no puedes, porque no quieres, porque es muy tarde ya. Tarde para ti enamorado de lo inasible y para mí que no tengo ni he de tener más paciencia para tu desvarió. Has elegido la muerte, el sufrimiento la perdida y ¿yo? Yo no puedo más que respetar tu elección, triste elección que no comparto pero acepto. Como se aceptan las sombras de lo que es en sí mismo triste y letal.  Te veo caer en el profundo pozo de la agonía escogida y no puedo más que musitar palabras tristes que no sirven ni servirán de consuelo ni a tu desazón ni a mi impotencia. Eliges caer, yo escojo vida. Vuelves tu espalda a mi presencia, no tengo más que hacer, nada que elegir, solo el olvido. Olvido de ti y de tu ineluctable tristeza, vana tristeza de lo que llamas amor y yo fantasía. Pero esa es la vida del desierto, el espejismo que todo lo retiene y que ante el oasis se torna cierto para quien ya murió, para quien vive muerto.

miércoles, 6 de julio de 2011

VICTORIA

Mi corazón de liebre ha retado de nuevo a la tortuga de mi razón a una carrera, como siempre ha salido la liebre disparada y cuando ya la muy tonta liebre cree que va ganando algo le pasa, es entonces cuando la parca tortuga toma la delantera, y paso a paso va remontando espacio mientras la liebre se echa plácidamente a descansar en medio del letargo, me alegra saber que ahora como tantas otras veces la tortuga ganara!

sábado, 2 de julio de 2011

TERRIBLE

TERRIBLE

Minúsculo, absurdamente insignificante, mínimo. Así se sintió tras descubrirlo. No sabía bien cómo había sucedido, simplemente pasó y todo lo que hasta entonces  creyó o vivió se rompió en dos.
Atrás quedaban la certeza y la seguridad de lo visto, lo olido, lo escuchado o percibido. Toda experiencia sensible quedaba banalizada, se tornaba intrascendente, aparente, marginal como él mismo, como su propia existencia terrenal. No pasaba lo mismo con las ideas, con la luminosa razón, que de tan iridiscente le dejaba ciego para todo lo que no fuese ella misma. Esa, que ahora llenaba todos los espacios, inaugurándolos con su presencia, transfigurándolos, desarraigándolos de toda seguridad o sentido, tan solo para resinificarlos.
Quiso hacerse una imagen de su descubrimiento pero no pudo. Hasta ese punto desbordaba su imaginación. Echó entonces mano de la analogía y lo supuso esférico, pensando en la grata perfección de la figura y en la belleza de su movimientos supo que sería un error pretender que “Él” fuera así, porque en su esencia negaba toda forma y cualquier movimiento. Es más, el cambio le resultaba refractario, inadmisible. Y sin embargo, esta ineludible humanidad que le agobiaba casi que le exigía buscar alguna clase de determinación o magnitud. Lo terrible de esta búsqueda es que siempre acababa en lo mismo: él puesto de narices ante la angustia de reconocer que perfecto, absoluto, eterno, infinito y finito no cuadraban. No lograba comprender la perfección como infinitud, pues esto sería sinónimo de indeterminación ¿Cómo abarcar entonces en una figura lo inabarcable? ¿Lo desbordante?

Cayó entonces en un mutismo transitorio, se miró a sí mismo en el reflejo de las aguas y asumió de una vez y para siempre el gesto que a partir de entonces habría de acompañarle, la mirada impenetrable, el gesto taciturno y serio, acorde presencia para lo que bien sabía le cabría de ahora en adelante: el pensar, el decir, el SER.

jueves, 30 de junio de 2011

LIBERACIÓN

LIBERACIÓN
Para William Betancourt,
Mi padre y mayor filósofo,
con todo mi amor
Tenía los ojos abiertos pese a la obscuridad, pero eso no era de extrañar. Llevaba años así, inmerso en un insomnio permanente.
Empezaba a amanecer, vio la sombra de su amigo tumbado a los pies del camastro y un esbozo de sonrisa se dibujó en su rostro. Era ¡tan joven!, no como él, a quien la vida le pesaba en el cuerpo y en el alma, en el hígado y el corazón; pues a pesar de haberse propuesto pensar, antes que sentir, debía aceptar que los sentimientos muchas veces habían ganado la batalla.
Un rayo de luz le llevó a decirse que aún era tiempo para cambiar su decisión. Irse sería en apariencia lo más conveniente, pero él nunca se había guiado por tal criterio, más bien por su contrario, de ahí que no lo hiciera. Pensar la sola posibilidad le daba nauseas, no se marcharía jamás, así nadie lo entendiese, sobre todo ella. Recordó a la mujer, sus lágrimas, la amargura que enturbiaba su mirada y que debería encarar más tarde cuando fuera a despedirse. El gesto de tristeza fue inmediato. Pobrecilla, pensó, cuán sola y perdida estaría de ahora en adelante, cuánto habría de sufrir y qué insoportable sería su dolor para  quienes la rodearan. Rió con algo de sorna al imaginar la situación. Por la vida práctica no se preocupaba, de ella se encargarían los amigos; hacia años ya que venían haciéndolo. ¡No!, lo difícil sería no estar juntos después de tantos años. Nadie lo entendería, ¿cómo hacerlo? Para muchos él era la víctima de este ser grosero e inconsecuente, que no dudaba en manotear e insultar a todos cada vez que se sentía alterada, cosa que pasaba casi a diario . No eran pocas las miradas de lástima que por esta causa él recibía; hubo incluso quien pensó que soportarla era una suerte de expiación filosófica, una ruta a la virtud. Lo que muy pocos conocían  era cuanto la amaba y cuán ligera había sido para él aquella carga, de qué modo fueron convenientes sus exabruptos; sobre todo porque ella decía aquello que él debía callar. Ella llamaba a su risa, afilaba su lengua y su razón, gracias precisamente a aquella irracionalidad que era tan suya y que, vista de un cierto modo, casi podría decirse razonable. Cuán perdido habría estado él si no la hubiese hallado en su camino, si ella nohubiera guiado sus pasos por este mundo que a él tan poco le importaba; si ella no lo liberara frecuentemente del peso de sus propias dudas y reflexiones, de la difícil prisión de su sabiduría. Ella había sido ese perro fiel que se lame las heridas sin dejar de gruñir y ladrar, ese al que no espantan los bastonazos que se le dan,  ni los terrones que se le tiran. Aquel  que todo lo soporta: el hambre, las pedradas y los golpes, que haciendo oídos sordos a las quejas que sobre él se emiten, te sigue haciendo menos duras las horas de penuria. Que se echa a tu lado al caer la noche con un gesto que solo en él puede llamarse compasivo. Era precisamente esa gran ternura la que siempre los había unido, ese ser cómplices entre los cómplices, compañeros eternos, complementos perfectos, como lo fuera la alegría de la tristeza, la ignorancia de la sabiduría o el error de la virtud. Ella y solo ella le había amado tal como él era, frágil, débil, un hombre apenas más prudente que los otros y tan solo algo más sabio. Ahora quedaría sumida en su soledad, eso lo sabía, esta última y final traición la desbordaría por completo y no sería posible hacerse más el sordo. Sintió las lágrimas corriendo por sus mejillas e intentó pasar el trago amargo, pero lo pastoso de su boca y el nudo en la garganta se lo impidieron. Era el dolor de la ausencia presentida, esa que se le develaba insoportable. La extrañaría más que a la luz del sol, lo sabía, allí en medio de las sombras venideras la anhelaría a su lado, tanto como ahora.
Frotó sus pies, nuevamente adoloridos e hinchados por los grilletes, pensó en este otro detalle, que irónicamente también había ignorado al desafiar a los jueces y su condena, ¡ah! ¡Cómo ama la parca reírse de la filosofía!
Helios y Eos, la de los rosados dedos, culminaban su tarea, la luz irrumpía dentro de la sombría estancia aclarándolo todo, miró ese nuevo amanecer sin nostalgia. No, no sería esta vida lo que extrañaría. Dejó salir una plegaria de sus labios para pedir a la divinidad le otorgase también a él el privilegio de esa luz. Especialmente cuando llegasen los amigos, tan queridos y tan pertenecientes. Ya no serían ellos quienes habrían de seguirle para entrar en la profundidad del diálogo, no se someterían más a las inclementes preguntas de su aguda ironía. Más bien, de ahora en más sería el quien les seguiría, no como sombra, que ni siquiera en dicha forma estaba dispuesto a abandonar Atenas, más bien como recuerdo o pertenencia. Si, ellos serían de ahora en adelante dueños universales de su legado, tanto de su vida como de su muerte, de su pensar, de su decir, del Mythos que seguramente erigirían en su honor o detrimento. Serían los últimos testigos de lo que fuera su existencia; ellos, no sus hijos, contemplarían sus últimos momentos y guardarían para sí la final exhalación con la que partiría su alma. De ahora en adelante habrían de ser Sócrates, se dijo y suspiro aliviado ante esta revelación liberadora; rió al constatar como finalmente la divinidad se compadecía de quien fuera su siervo y su profeta. Liberado, extendió los brazos, relajó los músculos de su agotado cuerpo, se tendió en la cama y tras muchos años de insomnio se durmió.

martes, 21 de junio de 2011

RECONOCIMIENTO

Soy Odiseo, yo que tantas veces me llame Penélope,
Me proyecte Calipso, me sentí Circe.
Yo que incluso llegue a imaginarme Escila, Nausica, Caribdis.
Finalmente lo he asumido, lo he sabido, lo he aceptado: Soy Odiseo.
He sido yo quien emprendió el viaje. Yo quien junto al divinal Diomedes
Tomo a la dulce diosa para atraerse la victoria.
Yo quien urdió la estratagema del caballo, quien tomo Troya.
Fue bajo mi espada que cayeron tantos.
Fue mi flecha la que mato a los pretendientes y recupero mi tálamo.
He dejado ciego  de mirada al ciclope y junto a los lotófagos me he alienado.
He perdido tripulaciones enteras, pero siempre, siempre me he salvado.
Porque en este viaje soy destino manifiesto. Ítaca total y absurda en el camino trasegado.
Por eso sé que puedo pagar el precio del saber y lo he pagado.
Por eso sé que puedo dar el paso, como en efecto lo he dado.
Porque soy Odiseo y no otra cosa, a mi casa hoy he regresado.

http://www.youtube.com/watch?v=lb2lOMUmTYs&feature=related

jueves, 9 de junio de 2011

EL TERRIBLE CASO DE VD

Esa mañana cuando se despertó VD se sintió particularmente poderosa, esto no era que la sorprendiera mucho a decir verdad, pues VD sabía desde hace tiempo que estaba muy por encima del promedio de personas comunes y corrientes. Y no, no era presunción suya, ni mucho menos, que no era VD de ese tipo de gente pesada que se cree caída del ombligo de Júpiter o se las pica de gran cosa. No, era más bien una certidumbre de esas, como que el cielo es cielo y no hay nada mejor que el olor del pan o del café recién hecho. Hoy, sin embargo, lo sentía de un modo diferente y aunque no  tenía muy claro cómo explicarlo, estaba más que segura de que pasarían cosas extraordinarias y de que ella obraría justo como factor desencadenante, ella haría, la diferencia e hincharía la bola. Extrañada, y aún un poco aletargada por el sueño, tomo sus cosas y se dirigió a la ducha. Nada como un buen baño para comenzar el día, sobre todo si era posible acompañarlo de un buen desayuno, lectura de periódico, cafecito… ya estaba sonriendo. Con VD pasaba siempre así, no podía evitarlo, era tan sencillo como pensar en algo para visualizarlo y sonreír. Sonreír como solo ella era capaz de hacerlo, con sus ojos, esos ojos a través de los cuales  las personas podían ver carcajearse el universo entero. Se baño con más placer que prisa- pese a que se le podía hacer tarde y tras vestirse empezó a tomar el desayuno, entonces lo supo, lo supo y se quedo petrificada, no tanto por lo que estaba pasando, sino  por el hecho de lo rápido que se había acostumbrado a ello, pese al poco tiempo transcurrido. Acerco de nuevo los labios a la taza del café y lo escucho, escucho como el color, el sabor, la temperatura de la bebida ingresaban en ella, ya no como registro consciente, que es como le suceden estas cosas a la gente común, no, sino como sensibilidad plena. Claro que eso tampoco parecía extraño, así de buenas a primeras, pero lo era, en verdad lo era, porque cuando VD dijo la palabra Café en dirección a su madre, está pudo sentirlo, sintió la intensidad del liquido en su garganta, bajando hacia su estomago, mientras el olor corría en dirección a su nariz. Se miraron sin apenas decir nada, entonces VD tomo la decisión más trascendente de ese día, averiguaría si pasaba igual con el resto del desayuno, de las cosas y palabras; y una vez lo hubo comprobado, se rio, se rio con la certeza de que en ese mismo instante todos sus vecinos reirían con ella, pues antes de hacerlo se había parado en la ventana para decir larga y prolongadamente su palabra favorita: “RISA”, luego sabiéndose poderosa inmensa, empezó a diseñar su día. Como siempre iría al colegio, pero esta vez contrariamente a lo que normalmente hacia, callaría, callaría y solo dejaría a sus ojos expresarse. Luego cuando todas sus amigas se reunieran a su alrededor  extrañadas ante esta su nueva osadía de callar VD lo diría, diría esa palabra, esa única palabra que desde que lo supo podía pensar: “FELICIDAD”

sábado, 28 de mayo de 2011

CLASES DE BRUJAS

La clasificación es tomada de Todas brujas – un libro que no debería faltar en ninguna biblioteca femenina por el bien de todos y todas, hombres ténganle más miedo a Blanca Nieves, Cenicienta, la bella durmiente y todo su combo, andan a la caza de príncipes, son dependientes, bobas, crédulas, incapaces de ver y cuidar por sí mismas, solo saben hacer oficio, son dependientes, se van con el primero que las besa, salen corriendo a la primera oportunidad y van dejando tirados los zapatos como por azar solo para que tengas que recorrer medio planeta buscándolas del modo más ridículo posible, además hacen que te enfrentes a mil peligros y ellas ni siquiera pretenden darse cuenta de ello, además horror de horrores les gusta vivir rodeadas de enanos a los que utilizan de una forma poco más que explotadora! No hombres más bien atrévanse a cambiar y elijan la bruja que más les gusta, porque una bruja sabrá siempre como ser seductoramente independiente, velara por sí misma, se quedará con el mejor compañero posible sin pretender traérselo a vivir a su casa, respetara las diferencias, tolerara a los amigos y a que te vayas con ellos por las noches – ella hará lo propio con sus amigas y bueno… te hará la vida maravillosamente entretenida y diferente, por eso hombres y mujeres, brujas y magos a escoger!

"bruja caprichosa:  Algunas mujeres aprenden de pequeñas que si te encaprichan lo suficiente la gente acaba temiéndoles a tus berrinches, consigues lo que quieres y también aprenden desde niñas que lo que importa finalmente, no es obtener lo que quieres, sino hacer que los demás hagan lo que sea por conformarte.
La bruja estrella: Así como a algunas les funcionan los caprichos otras brujas se valen de otro recurso igual de eficiente, el de llamar la atención y hacer que todos estén pendientes de ellas. Se las ingenian para impactar en toda ocasión y hacer lo necesario para que todos hablen de ellas.

La bruja seductora: Las buenas brujas saben que, para seducir, hay que observar atentamente y descubrir los gustos y debilidades del otro: el poder de la seducción consiste en saber cuándo ser sexy, cuándo cortante, cuándo amistosa, cuándo diferente. Desplegar todos sus encantos como un pavo real puede ser un buen truco, a veces, pero otras, es necesario dosificarlos y dejar espacios para que sea el otro quien se luzca, mientras ella festeja cada ocurrencia de su presa.

La bruja oportunista: Hay malas que no tienen ningún plan, hasta ver lo que promete y entonces dicen “¡eso quiero!” y así sobre la marcha, van logrando lo que buscan.

La bruja competitiva: Enseña cómo hacer cada cosa, porque ella la hace mejor que nadie, luego logra que el otro entre en competencia con ella, gracias a lo cual el otro trabaja y ella descansa.
La bruja hipocondríaca: Preguntarle: “¿Cómo está?” implica ocupar toda una tarde para escuchar la respuesta, que incluye un listado de enfermedades que ni siquiera existen. Así logra que todos estén preocupados por ella, la ayuden con todo y la traten como si fuera de cristal.

La bruja snob: Tiene una impresionante vida social, conoce a montones de gente influyente… y todos están dispuestos a agradarle y hacerle mil favores.

La bruja vampiresa: Es sexi, atractiva, está siempre vestida de mujer fatal. Así logra ser el centro de atracción y el terror de las mujeres casadas. Los hombres se ponen nerviosos con su presencia y le dicen a todo que sí.

La bruja glamorosa: Es el ideal de cualquier mujer, no se pone nada encima que nos sea de máxima calidad. Así crea un aura de exclusividad y lujo que  muchas personas les hace sentir que están con alguien muy importante alguien a quien hay que escuchar atentamente.

La bruja todo terreno: A nadie le sorprende lo que hace o dice. Siempre es impredecible y le fascinan  los desafíos. Se anima a cualquier cosa, en cualquier momento, y todos le temen porque no saben con que plan loco saldrá. Es la bruja que más se divierte.

La bruja sabelotodo: No hay área de la vida en que se le pueda discutir algo, porque está informada de todo y conoce la solución de cada problema. Así se convirtió en líder de su grupo, con el estilo de vida de “ella decide, porque es la que sabe todo” La sabiduría le da a la mujer la mayor autoridad de bruja.

Si a una se le mete algo en la cabeza, no para hasta conseguirlo, sea cual fuere su estilo. El universo juega a favor de las que tienen un objetivo.”

Pág.175-178

¿Y tu cuál de todas eres? Recuerda que puedes ser varias o ¡todas! ¡Yo por lo menos soy cuatro!

viernes, 27 de mayo de 2011

TENTACIÓN

Me tientas, te acercas y simplemente dejas caer la tentación a mi lado, así simplemente como si no quisieras, como si de ti no se tratase, como si no fueras responsable de este alboroto, de este total cataclismo de mi corazón. Te dejas caer con una sonrisa ingenua y procaz, y me miras como si no estuvieras, y te vas llevando mi juicio, la lucidez de mis ideas y ya está, un beso se me vuela de los labios y te alcanza, y tu huyendo, haciéndote el difícil, el luchado, corres, te alejas y yo cual conejo tras zanahoria ya caí presa de un encanto que al desconocer las fuerzas de su propio ímpetu me traga entera y por más que me encomiende, sé que todo está perdido, has cautivado mi corazón, mi ser entero con esa tu inocencia que simplemente vas dejando caer por los espacios como si no quisieras, como si no te delatara cierto rayo de luz en la mirada. Pero ya es tarde, es demasiado tarde para salvarse, porque aunque quisiera hacerlo la voluntad presa de tus labios, de tus ojos de tus manos se ha marchado hasta tu orilla para como por azar robarte un beso, y yo, yo simplemente muero presa del encanto que desborda mi ser y agita mi corazón. Es entonces cuando llega la verdad que afirma, que grita, gime y se revuelca tan solo para decir lo que hace tiempo sé y callo, lo que no quisiera decir y digo, dice que ¡te quiero!


http://www.youtube.com/watch?v=9x8bWi7sdVM

SOY

Mujer llama, mujer pájaro, sombrero, llave y alambre. Mujer de fuego y de espinas, mujer que arde. Soy mujer hecha de vientos, de huracanes y de mares. Mujer que cruje y que llora, que ríe, que sabe. Como saben las sonrisas, los arreboles, las naves, que se pierden en el tiempo, y van tejiendo contrastes.
Soy mujer hecha de aliento, soy sombra que va buscándote, no para llenar vacios, sino para en esas tardes, en que el sol quema en los ojos, darte cobijo, cuidarte.
Soy mujer que va volando como hoja por los aires, no tengo patria, ni puerto donde pueda refugiarme; más que entre los brazos tuyos, que voy soñando inquietantes, porque me buscan y encuentran, hecha soplo entre los aires. Que me he perdido en el mundo hecha sol, marisma, balde, y de tanto que me he hecho, no sé si pueda encontrarme, pero ahora no me importa, porque sé que tú has de hallarme, hecha un nidito a la vera, de tu corazón amante.

CERTEZA

Al buen zorro que domestique hace tiempo, en la distancia lo miro contemplarme, ambos sabemos que lo ya vivido, de la memoria jamás podrá borrarse. Al marranito lo deje en su marranera, no con desprecio que no he de fustigarle; simplemente no aconsejan los doctores desordenar los pequeños animales. El colibrí voló hace tiempo lejos, como era preciso que volase, no sería sano que a su ser, el pequeño pajarito renunciase. A ti entre tanto ,a quien creí yo un príncipe, te veo de nuevo en el estanque, donde plácidamente te asoleas, mientras dos ranas vienen a aclamarte, a llenarte de arrumacos de esos, que se hacen con placer a los amantes. Yo entre tanto mi querido sapo, feliz me siento ahora al contemplarte, tan soslayado en tu naturaleza, tan complacido y tan campante, porque sé que vuelto entre los tuyos tendrás la felicidad que en mi no estaba darte. Entre tanto sonrió mientras pienso que ¡Debo abandonar los animales!

DESCUBRIMIENTO

Se encontraron, se vieron y midieron palmo a palmo, ella lo vio y creyó que él era el definitivo, el príncipe por el que había estado esperando –¡ al fin se dijo!- ¡pobre ignorante de ella! ¡ilusa!. Finalmente las evidencias acabarían por llegar  y tristemente como tantas veces, tendría que reconocerlo – no era nada diferente del resto, como tantos estaba lleno de defectos, no era más que otro sapo más en el estanque: pequeño,  mínimo, cotidiano,  lleno de equivocaciones y de fallos, común, nada extraordinario. Lo observo de nuevo, ahora sin la fantasía propia del inicio, y lo vio tal y como era, sin pausas y sin prisas, sin ambages, pensando en despedirse, pero entonces, tal y como en una revelación todo se ilumino y en medio de la luz se vio a sí misma. Sin lugar a dudas no era ella la princesa de los cuentos de hadas , más bien una mezcla entre dama y bruja. Tenía que reconocerlo, también ella de vez en cuando apestaba, con sus minucias y resabios, sus afanes de control, sus pequeñeces, esos egoísmos furibundos y atrabiliarios  que la llevan a no ceder la almohada; la ironía y la crítica, los descuidos que en  ella, si justificaba. Y entonces comprendió que nada de eso borraba su ternura, ni la grandeza y ni la  bondad de su propia alma. Así que olvidando los anhelos de nobleza, se reconoció tal y como era, simple rana. Volvió  entonces a mirar al sapo, algo más contenta y más tranquila, croando se dirigió al estanque en pos de él, dispuesta a vivir un para ahora que con suerte se convertiría en un para mañana.

miércoles, 25 de mayo de 2011

LOQUITAS NECIAS

Hoy vinieron las palabras a buscarme, me rodearon con susurros y caricias, se dijeron a sí mismas con mil voces, nuevas, nuevas. Hoy llegaron vestiditas de colores, de sabores y de olores a probarse, se mezclaron entre ellas. Se tejieron en mil nombres pequeñitas, gigantescas. Hoy vinieron con sus pasos sigilosos, juguetonas, necias, se colgaron de los muebles, se sentaron a mi mesa, me miraron a los ojos y me hicieron muecas. No tenían pasaporte, no aceptaban ni una regla, simplemente se esparcían en las sillas, necias, necias! Se colaron entre las cortinas, recorrieron los rincones y las enredaderas, dijeron tener sed de este mundo, de cama y mesa. Pronunciaron un discurso a atrabiliario declarándose del todo exentas de las viejas reglas de los diccionarios y de las enciclopedias. Señalaron sus inconformismos y se aliaron entre ellas, para hacer la revuelta del absurdo contra las academias. Se negaron a tener significado, a aceptar la lógica tremenda de decirse siempre de igual modo, forma o manera. Renunciaron pues a la gramática y a la ortografía horrenda, que las encierra entre cánones y reglas. Determinaron prescindir de quien las enuncia, las usa o las inventa, y lejos del mundo de los hombres volverse simple jerga. Se liberaron del peso del discurso y así desposeídas, vacías,  exentas, jugaron a cantarse entre las voces sin más pretensión que ser viento entre las cuerdas. Aire que clama en las gargantas y que desde las gargantas se reinventa. Hoy vinieron a buscarme las palabras con la simple y llana meta, de perder todo ritmo y armonía, todo decir y toda idea, y no ser más que libertad incierta.

LOQUITAS NECIAS

Hoy vinieron las palabras a buscarme, me rodearon con susurros y caricias, se dijeron a sí mismas con mil voces, nuevas, nuevas. Hoy llegaron vestiditas de colores, de sabores y de olores a probarse, se mezclaron entre ellas. Se tejieron en mil nombres pequeñitas, gigantescas. Hoy vinieron con sus pasos sigilosos, juguetonas, necias, se colgaron de los muebles, se sentaron a mi mesa, me miraron a los ojos y me hicieron muecas. No tenían pasaporte, no aceptaban ni una regla, simplemente se esparcían en las sillas, necias, necias! Se colaron entre las cortinas, recorrieron los rincones y las enredaderas, dijeron tener sed de este mundo, de cama y mesa. Pronunciaron un discurso a atrabiliario declarándose del todo exentas de las viejas reglas de los diccionarios y de las enciclopedias. Señalaron sus inconformismos y se aliaron entre ellas, para hacer la revuelta del absurdo contra las academias. Se negaron a tener significado, a aceptar la lógica tremenda de decirse siempre de igual modo, forma o manera. Renunciaron pues a la gramática y a la ortografía horrenda, que las encierra entre cánones y reglas. Determinaron prescindir de quien las enuncia, las usa o las inventa, y lejos del mundo de los hombres volverse simple jerga. Se liberaron del peso del discurso y así desposeídas, vacías,  exentas, jugaron a cantarse entre las voces sin más pretensión que ser viento entre las cuerdas. Aire que clama en las gargantas y que desde las gargantas se reinventa. Hoy vinieron a buscarme las palabras con la simple y llana meta, de perder todo ritmo y armonía, todo decir y toda idea, y no ser más que libertad incierta.

MISIVA

Querido juicio: sé muy bien que andas contento deambulando por las calles, saltando muros y corriendo aceras. Que no te interesa mucho retornar a mi lado y que crees que con esta actitud realmente no me perjudicas ni me agravias, realmente entiendo en parte tus motivos, ¿cómo habría de afectarme el perderte por un tiempo?, realmente no es que la pase mal si río más, leo, me divierto, veo películas que me interesan, salgo con mis amigas y amigos… así que a que tienes razón en preguntarte acerca de todos estos reclamos que hago de tu presencia, pero es que a decir verdad ¡te necesito! Me haces falta y me temo que en caso de que no regreses pronto varias personas se verán seriamente afectadas por tu ausencia, así que anda regresa, no seas malo. A cambio yo prometo darte vacaciones de vez en cuando, para que así ocasionalmente podamos descansar uno del otro y ser felices ambos a la vez. Con mucho amor y nostalgia, algunas veces tuya y otras no: Gilma.

CONVICCIÓN

Total y definitiva, a la vez propia y extraña, tan tuya como ajena, tan mía, como de nadie. Voy mordiendo las esquinas de la vida, durmiéndome en el velo de la luna y abrigando un sol en los sentidos. No eres tú quien enciende mi llama, no eres quien  convoca mi imaginación; soy yo misma quien lo hace, no por maldad, ni por despecho, es que te excluyo, es más bien  por lo que ya he vivido. Porque me he andado y recorrido, he seguido el hilo que me diera Ariadna; pero al contrario de Teseo no me escapó, tejo más bien mi propio laberinto. No me interesa huir, me seduce por otra parte conocerme y en medio de él intento comprenderme. Por eso ahora que me descubro y me conquisto, no puedo fatalmente abandonarme, ni siquiera en tu playa libertaria, que sería quizá el mayor peligro, pues entrando en ella, podría anhelar quedarme. Te propongo por otra parte compartirme, darte en prenda más que mi ser, una sonrisa. Una caricia que te acompañe, que te alumbre, como una lámpara en las noches; sin pretender ser sol o estrella, sino más bien el preludio de una entrega, que no ha de ser total, no puede serlo, porque en mi corazón, como ya dije; antes de verte, me contemplo, antes de amarte, a mi me quiero; aunque sé que a ratos, por momentos a ti  también te siento y pertenezco. Si esto te basta, y eres  feliz, puedes amarme, si te consuela y satisface, entonces quédate; de otra forma mejor has de marcharte, pues aunque quiera no puedo traicionarme.

BIENVENIDA

Ahora que el amor llego para quedarse, hizo hueco en la cama y se sentó a la mesa en las mañanas y en las tardes, invadió sigiloso todos los rincones y los  fue apropiando con brinquitos suaves, con pasos pequeños y  grandes, él y yo nos sentamos a conversar mirándonos a los ojos, nos llamamos por el nombre y empleamos frases de cariño de esas que sacan de quicio a los intelectuales y filósofos pero que a él simplemente le fascinan, porque es así y le gusta trasegar lo tierno.  Como es duende y anda loco en su locura amor me incita a construir lo cierto, a jugarme la cabeza a cada instante para robarle el corazón con puros besos. Me lleva a jugar a las adivinanzas, para que yo le llame por mil nombres, me esconde un sueño entre sus dulces brazos y me invita a desandar lo cierto, para que haga posible lo imposible y le baje cada día el cielo entero. De nuestra vida simple a echado a las rutinas, las ha insultado y les corrió el asiento. Al tiempo lo invito para que se quedara, y se hiciera a si mismo siempre nuevo y eterno. A la tarde le propuso un juego de escondidas que a decir verdad debía ser de encuentros, porque al amor le gusta más darse que esconderse, y vive hallándose en mi sin  grandes aspavientos. Amor y yo nos hemos vuelto fans de los helados, de los silencios compartidos, de los besos. Nos gusta el reto de las intimidades, las historias de dos, las anécdotas, ansias y anhelos. Compartimos el deseo de trascendencia, nos seduce el futuro que es incierto, porque Amor vino para quedarse,  llenar los días, realizar los sueños, y en su mirada anuncia primaveras, otoños compartidos y algún final invierno.

AÑEJOS

Se miraron como si el paso de los años no hubiese acontecido, con las mismas ansias e igual deseo, con el amor de siempre, los labios apretados por los besos, tanto  tiempo contenidos. El temblor fue apoderándose de ambos. El ansioso, ella tensa, reservada. Se miraron sin apenas decir nada y diciéndolo todo en el silencio. Las lagrimas bañando sus mejillas, las sonrisas extendiendo el tiempo, procurando el valor ausente para decirse hola, para extender la mano y saludarse. Los pasos tambaleantes, dolorosos, van desandando las distancias, los años, los adioses y silencios, la ausencia largamente prolongada. Las manos sudorosas y muy frías traen de atrás las añoranzas  de los amores peregrinos y furtivos;  que van recuperando del olvido el anhelo de eternidad, vuelto nostalgia. Los besos brotan pronto,  cautelosos, dulces, trémulos, plenos, anhelantes y en medio del encuentro, un torbellino de voces, de murmullos y  palabras …
- Nunca te olvide,
- yo  a ti tampoco
 – Te soñé siempre, cada día, cada mañana
 – estaré aquí  para ti,  aunque estés lejos,
-  Te seguiré aún en la distancia…
y así añejos en el tiempo, van volviéndose: amor, vida, sol, nube, montaña, y se pierden en el tiempo detenido, de ese amor que va cubriendo las distancias, los años que se fueron y otros besos, otros amaneceres y otras ansias. Y poco importa que en este amor ya nunca, vuelva a acontecer otra mañana.

HONESTIDAD

Conozco tu estrategia,  sos un gato, como tal te ocultas y te alejas, te escondes y de pronto cuando ya no se te espera, apareces, te dejas ver…igual de seductor y fascinante…una tentación para los ojos, para la vida, para mis manos, me provocas y haces que quiera verte, tocarte, acariciarte, jugar contigo, pero cuando extiendo los dedos ya te has ido; a veces, sin embargo, te aproximas cauteloso y ronroneas a mi lado, entonces toda la ternura se esparce por mi alma y hace cantar mi corazón, pero te sé de siempre y ese momento eterno no habrá de perdurar más que un instante, ¿cómo podría hacerlo?. Los que amamos a los gatos lo sabemos. Nunca nadie podrá tenerte más allá de lo que tú quieras, vendrás, te irás a los tejados de otras gentes en el incesante deambular de tantas noches, de pronto volverás tal vez para jugar conmigo y entonces no importaran ni la ansiedad ni la duda, porque con tu llegada soñare, soñare que un día tal vez te quedes y te dejes arrullar, por el compas de mi corazón… conozco tu estrategia, SOY UN GATO.

REIVINDICACIÓN

Estoy loca y decido reivindicar mi locura, esta locura sana y saludable que nace del profundo deseo de estar viva, de no rendirme y de crear. De darme con generosidad a quien pueda necesitarme, de compartir los saberes, de conjugar las ansias infinitas de alcanzar una vida feliz y constructiva, en la que ser autentico no salga tan caro, en la que sean posibles segundas, tercera y cuartas oportunidades, en la que se abran los compases para la comprensión, la solidaridad y el apoyo. Estoy loca en la absoluta convicción de que es posible un mundo más tierno y más humano. Estoy loca en la disposición de ver el lado amable de la vida, de defender la alegría y el encanto propio de los buenos momentos, de la risa, el júbilo y el llanto. Ese llanto que no nace del dolor sino del estar profundamente conmovidos. Estoy loca y te invito a jugar conmigo, a conjugar está indecible locura de la trasparencia del alma, del abrazo tierno, de la palabra generosa, de transgredir todo limite y frontera, tan solo para soñar que desde la inmensidad de un beso es posible alcanzar las estrellas.

PARA SEGUIR VIVIENDO

Tantas muertes de repente acumuladas, constructoras de este ser, de su consciencia, muertes que llegando te atraviesan, y te dejan con un dolor agudo que perfora el alma. Muertes que llegan entre lagrimas, abrazos solidarios o traidores, muertes que te gritan que estuviste ciega, ciega para la traición que rompe los lazos y anega el corazón dejándote abandonada entre el tumulto, rota, quebrada en dos. Muertes que te transitan, vil producto de actos de inconsciencia, de egoísmo. Muertes que sin embargo entre las heridas van trayendo el propio germen de otra vida. Esa que hay que construir, que hay que inventarse, para poder seguir respirando y existiendo, esa que como las olas en la playa arrastran el ser que fuiste, esa que eras. Y con cada muerte arriba la lucidez que te priva de la tierna ingenuidad, de la pertinaz confianza, de la triste inocencia, para dejar en su lugar no la amargura, sino el tibio abrazo de una verdad, que te conforta aunque tenerla a tu lado sea algo que duela. Una verdad que te perfora, te mata y fortalece, te levanta como un mástil,  y es una roca en la playa a la que asirte en medio de la tempestad violenta, y en ese morir vas renaciendo, y en ese nacer tienes contigo la certeza de que seguramente una nueva muerte te asecha, pero al haberla ya vivido, al conocerla, no la temes, simplemente, te lo tomas con calma, la aguardas, la esperas, sin temor, sin ilusión, simplemente con integridad serena.

ARRIVO

Ahora que el amor llego para quedarse, hizo hueco en la cama y se sentó a la mesa en las mañanas y en las tardes, invadió sigiloso todos los rincones y los  fue apropiando con brinquitos suaves, con pasos pequeños y  grandes, él y yo nos sentamos a conversar mirándonos a los ojos, nos llamamos por el nombre y empleamos frases de cariño de esas que sacan de quicio a los intelectuales y filósofos pero que a él simplemente le fascinan, porque es así y le gusta trasegar lo tierno.  Como es duende y anda loco en su locura amor me incita a construir lo cierto, a jugarme la cabeza a cada instante para robarle el corazón con puros besos. Me lleva a jugar a las adivinanzas, para que yo le llame por mil nombres, me esconde un sueño entre sus dulces brazos y me invita a desandar lo cierto, para que haga posible lo imposible y le baje cada día el cielo entero. De nuestra vida simple a echado a las rutinas, las ha insultado y les corrió el asiento. Al tiempo lo invito para que se quedara, y se hiciera a si mismo siempre nuevo y eterno. A la tarde le propuso un juego de escondidas que a decir verdad debía ser de encuentros, porque al amor le gusta más darse que esconderse, y vive hallándose en mi sin  grandes aspavientos. Amor y yo nos hemos vuelto fans de los helados, de los silencios compartidos, de los besos. Nos gusta el reto de las intimidades, las historias de dos, las anécdotas, ansias y anhelos. Compartimos el deseo de trascendencia, nos seduce el futuro que es incierto, porque Amor vino para quedarse,  llenar los días, realizar los sueños, y en su mirada anuncia primaveras, otoños compartidos y algún final invierno.

lunes, 23 de mayo de 2011

TODAS BRUJAS

Una verdadera pedagogía del ser en femenino, que en medio del humor y la crítica constructiva cuestiona y decosntruye muchas de los arraigos femeninos al esquema patriarcal de cultura y de posicionamiento en el mundo. Transgresor e inquietante, logra ser estimulante y al mismo tiempo sumamente cuestionador. La calidad del texto y los soportes que tiene – profundamente arraigados en la teoría de género – hacen que sea una lectura amena y estructurante. Es uno de los libros que no deben faltar en nuestras bibliotecas ni en las de los varones, precisamente porque toca con las grandes contradicciones que vivimos unas y otros, y a la vez se enfoca en aquello que debemos ya no digamos cambiar – que hay mucha bruja suelta por ahí y algunas francamente peligrosas – sino poder asumir en la consciencia a fuer de llegar a construir una sociedad verdaderamente igualitaria y equitativa, más honesta en su ser y en su querer ser.

A continuación les dejo con la entrevista que hicieran a la autora cuando estuvo en Bogotá para la feria del libro:
http://www.canalrcnmsn.com/content/ana_von_rebeur_habl%C3%B3_de_%E2%80%98todas_brujas_las_ventajas_de_ser_mala%E2%80%99

Les presento su  blog: http://todasbrujas.blogspot.com/
He aquí un aparte para que se animen a leerlo:
¿Por qué seremos buenas?
"Desde que nacemos escuchamos "Debes ser una niña buena", "No seas mala", "¡Que buena eres!", "¡Que niña tan dócil", y tantas otras frases por el estilo con las que nos bombardean toda la infancia.
Además nos van cargando toda la vida con culpas y responsabilidades que no nos corresponden: "Cuida de tu hermanito", "Tu debes dar el ejemplo", "No hagas tu lo mismo que ellos", "¡Cómo pudiste hacer algo asi. Las señoritas no hacen esas cosas!", "si no te comportas serás una verguenza para la familia"...¡uf! toda mujer siente muy dentro de ella que es culpable de un millón de cosas: somos malas amigas, malas madres, esposas frías, tristes, regañonas o cansadas.
La sociedad entera está en una especie de "cruzada anti mujer feliz" desde hace miles de años" Pag.11.

sábado, 21 de mayo de 2011

ACEPTACIÓN

Déjate llegar y te leo un cuento, uno de esos que hacen soñar, en el que los héroes desenredan la madeja para allegarse al monstruo que tristemente y con su cabeza habrá de pagar el precio de la tan amada libertad

Déjate llegar y sube a través de mi voz al barco que al divinal Odiseo arranca del amado hogar para aproximarlo a la aventura de ser simplemente el mismo, un hombre que como tal no puede renunciar al natural apego por el saber
vente con él a visitar a lestrigones y lotófagos, derrota también tu al ingenuo ciclope, escapa de las garras de la terrible Circe que busca reducirte y convertirte en animal,
Sueña en el regazo de la dulce Calipso, sin renunciar al anhelo de tu soledad , allégate a su piedad al construir la balsa que ha de granjearte el retorno al hogar
sigue con mi voz el destino de tu Ítaca, esa de la que ni siquiera la virginal Nausica te podrá arrancar.

domingo, 15 de mayo de 2011

LOQUITAS NECIAS

 Hoy vinieron las palabras a buscarme, me rodearon con susurros y caricias, se dijeron a sí mismas con mil voces, nuevas, nuevas. Hoy llegaron vestiditas de colores, de sabores y de olores a probarse, se mezclaron entre ellas. Se tejieron en mil nombres pequeñitas, gigantescas. Hoy vinieron con sus pasos sigilosos, juguetonas, necias, se colgaron de los muebles, se sentaron a mi mesa, me miraron a los ojos y me hicieron muecas. No tenían pasaporte, no aceptaban ni una regla, simplemente se esparcían en las sillas, necias, necias! Se colaron entre las cortinas, recorrieron los rincones y las enredaderas, dijeron tener sed de este mundo, de cama y mesa. Pronunciaron un discurso a atrabiliario declarándose del todo exentas de las viejas reglas de los diccionarios y de las enciclopedias. Señalaron sus inconformismos y se aliaron entre ellas, para hacer la revuelta del absurdo contra las academias. Se negaron a tener significado, a aceptar la lógica tremenda de decirse siempre de igual modo, forma o manera. Renunciaron pues a la gramática y a la ortografía horrenda, que las encierra entre cánones y reglas. Determinaron prescindir de quien las enuncia, las usa o las inventa, y lejos del mundo de los hombres volverse simple jerga. Se liberaron del peso del discurso y así desposeídas, vacías,  exentas, jugaron a cantarse entre las voces sin más pretensión que ser viento entre las cuerdas. Aire que clama en las gargantas y que desde las gargantas se reinventa. Hoy vinieron a buscarme las palabras con la simple y llana meta, de perder todo ritmo y armonía, todo decir y toda idea, y no ser más que libertad incierta.