Sé, sé que a veces me pierdo en medio del laberinto de mi
propio corazón, que no sigo la lógica y me niego a transigir.
Sé que puedo ser difícil, incluso insoportable, que pido de
mes en mes que me bajen la luna y las estrellas, así tenga bien claro que no
puedo, ni podré jamás quedarme con ellas, porque el regalo va en lo que una
mirada encierra.
Sé que soy cursi en ocasiones, y que me gustan las canciones
de amor, porque me roban el alma en un instante y hacen latir mi corazón con
ilusión, así lo que digan no vaya nunca a realizarse.
Sé que no siempre soy coherente, que muchas veces pido lo
imposible, pero ojo lo pido porque también lo doy. Porque no tengo reparos en
buscarte, aun cuando te pierdes y te escondes, del mundo, de los otros y aunque
me duela, de mi corazón.
Sé que no quiero que te pierdas o te borres, que me gusta
que te asomes por mis días y los ilumines así sea un poco con los rayos de tu
amor.
Sé que puedo ser difícil por momentos, que me gusta la pelea
con y sin argumentos, porque ella de un modo particular y cierto encierra parte
de una verdad, que muchas veces he y no he del todo descubierto.
Sé que es posible que no cambie, que me mantenga algo tonta
y algo boba, como también cuerda, inteligente y loca, porque sé que más allá de
todo, me gusta simplemente ser quien soy y lo que soy.
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