Soy quien soy y quien parezco. Una y distinta. A veces atravieso los espejos¸ sigo al conejo, entro en la madriguera, le doy la mano a seres fabulosos y me detengo. Tomo el té con el tiempo, hablo y discuto con las cartas, rayo en la locura de lo imaginario, me libero de los reparos del buen juicio, me hago pequeña o me agiganto; pero así mismo de vez en cuando vuelvo, y en el volver me hallo cara a cara con esa otra que mide las palabras y calibra los gestos.
martes, 13 de febrero de 2018
Amor, amor, amor
Amor esa palabra que nos habita y construye, que se labra en el cuerpo y en el alma, que nos hace debatirnos, revelarnos, construirnos, luchar contra gigantes y molinos, detener el paso, ajustar el cronograma, reprogramar la agenda. Amor ese equipaje que no queremos ni podemos dejar, esa guerra que no admite paz, pero que al contrario de las otras tiene como mayor victoria la serenidad que es propia de dos almas, de dos cuerpos que se funden en el más dulce y profundo de los encuentros.
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