domingo, 15 de noviembre de 2015

UN GATO

Un gato, eso eres no otra cosa, un gato de los que corren libres por la vida en pos de sus sueños y proyectos, de los que se trepan a la luna y la conquistan simplemente porque saben cómo y pueden hacerlo. Un gato que se aproxima cuando lo desea y lo siente y al que no es posible apresar, de esos que te dan su amor y su ternura pero a los que no es posible retener, ni forzar porque simplemente se pertenecen a sí mismos, y yo, yo te quiero como sos, como gato, y aunque a veces pretendo que me busques cuando quiero, sé que no es sabio hacerlo, porque nadie fuerza a un gato a hacer lo que él no quiere, por el contrario voy aprendiendo a quererte así gatuno como eres, a contemplarte y disfrutar de saber que me buscaras eventualmente y entonces será la alegría de tenerte, voy aprendiendo a darte espacio y a confiar en tu cariño así como lo das, sólido y libertario, generoso, protector pero ajeno a posesiones y exigencias, voy aprendiendo a recibirte en las noches y mañanas, a respetar tu espacio y tu ser, sin alterarme, sin enojarme y sin pensar que porque no te veo no estés. Si sos un gato, y yo que amo a los gatos sé muy bien que solo en medio de tu libertad te puedo querer.


viernes, 13 de noviembre de 2015

TE INVENTE

Te invente, no eras real, te invente desde mis ganas y mi fantasía. Fuiste un bello producto de mi imaginación pero no más que eso.
Te tejí desde mis sueños, desde mis ganas de amar, de sentir, de construir  futuro, quizás por eso construí este mundo, este pequeño rincón de paraíso para ti. Y desde ahí te amé, te di cuanto podía dar, lo mejor de mí misma, mi ser entero. Pero al no ser más que un espejismo un día descubrí el engaño.

Me supe sola, medí cuenta como hacen los niños de diez años que ese  querido amigo imaginario no es más que eso, una parte dislocada de su ser a la que deben renunciar para seguir viviendo, para poder hallar por fin a alguien real, que sienta, vibre, exista y ame de un modo parecido al de ellos, por no decir igual.